The Strongest celebra 106 años de existencia institucional en medio de una bonanza de éxitos deportivos, que lo llevaron a ganar cuatro de cinco torneos nacionales.
Sin lugar a dudas, el actual
momento que vive el Tigre es el mejor en toda su historia deportiva,
fue campeón en cuatro oportunidades, se clasificó a tres ediciones de
la Copa Libertadores y dos de la Copa Sudamericanas, y está a tres
puntos de ubicarse entre los mejores 16 equipos del continente
sudamericano.
Fundado el 8 de abril de 1908 por un grupo de
jóvenes, el Tigre se convirtió con el pasar del tiempo en un símbolo
del fútbol paceño y nacional, su nombre traspasó las fronteras y es uno
de los clubes de mayor antigüedad en América.
Su primer
presidente fue José León López Villamil, mientras que Víctor Manuel
Franco fue quien propuso los colores amarillo y negro a la naciente
institución deportivo.
En sus primeros años, el Tigre sostuvo
partidos amistosos con clubes locales hasta que en 1911, la Prefectura
de La Paz organizó un torneo en el que obtuvo su primera corona.
En
1914 nació La Paz Foot-ball Asociation (Asociación de Fútbol de La
Paz) y en su primer torneo oficial tiene al Tigre como campeón.
Durante
el periodo amateur, The Strongest ganó 14 títulos paceños. Desde que
se instauró el profesionalismo en La Paz (1950), se adjudicó seis
torneos.
No sólo fue el primer campeón del fútbol paceño,
también fue el primer ganador de la Liga del Fútbol Profesional
Boliviano, fundada en 1977 y se quedó con 11 títulos nacionales: 1977,
1986, 1989, 1993, 2003 (dos), Clausura 2004, Apertura 2011-12, Clausura
2011-12, Apertura 2012-13, Apertura 2013-14.
CAMPEÓN INVICTO EN EL TORNEO DE 1930
Hace casi ocho décadas y media, los atigrados tenían en Universitario a su clásico adversario futbolístico.
Entre los recuerdos más gratos que tiene The Strongest en su historia, está aquel torneo de 1930 el que lo ganó de manera invicta cuando cumplió los 22 años de vida institucional.
El año precedente, The Strongest -que ya había ingresado a la historia con creces- quedó subcampeón ante su tradicional rival de entonces Universitario que consiguió el título del torneo de 1929.
Empezó con ímpetu la gestión en la que cumplía 22 años, a contracorriente de la crisis económica mundial cuyo impacto se hacía notorio en Bolivia. Al promediar enero, cuando fue estrenado el estadio “Presidente Hernando Siles”, tuvo resarcimiento miraflorino venciendo a su adversario en el memorable encuentro inaugural.
El emblemático Eduardo Reyes Ortiz inauguró el marcador, a través de tiro libre.
La gestión no fue sencilla. Hubo altas y bajas. La enfermedad del presidente del club, Héctor Maldonado, llevó a modificación de planes en cuanto a compromisos y programación conmemorativa institucional de abril, sin embargo, ese XXII aniversario de fundación es también de los más recordados y tiempo de logros sobresalientes del club gualdinegro, que vaya los ha tenido.
A dos días de su aniversario, en su edición de domingo El Diario anunció que la entidad aurinegra posponía un par de semanas su celebración anual, que ya se caracterizaba por el “alborozo”. Destacó que en algo más de veinte años era gran “familia”, numerosa y a la vez unida fraternalmente. Entrando en lo que ya constituía identidad definida, añadió acertadamente que el nexo aglutinante de los/as socios/as eran, “/…/ camaradería y afectos ejemplares /…/”. Así además, remarcó el matutino, es que se había logrado imagen prístina y profundo arraigo popular.
También resaltando los valores que dinámicamente identificaban a la comunidad stronguista, el mismo martes 8 de abril, La Razón, dirigida por Gustavo Carlos Otero, presidente atigrado la siguiente década, puso énfasis no sólo en los lauros deportivos, y superación de adversidades respectivas, sino en lo que constituye genuino “/…/ triunfo de los ideales /…/” de los jóvenes fundadores de 1908. Estos se sintetizan como el persistente compromiso ante todo, despliegue de fuerzas sin mezquindad y valiente carácter batallador. A los cuales se agregaron la solidaridad y empeño formativo en calidad decomplementos del deporte.
De esa manera es que fueron superados prejuicios respecto al fútbol de inicios del siglo XX, que ciertos sectores conservadores calificaron de carente de sentido y hasta nocivo para la sociedad. Además, contrarrestando actitudes señoriales o reacias al esfuerzo, los iniciadores encabezados por José López Villamil habían demostrado que una institución podía adquirir estabilidad y larga vida, sin caer en la rutina o el desgaste. Así el gualdinegro consiguió ser “/…/ símbolo del fútbol paceño /…/” y boliviano. Y asimismo, referente de vida asociado con su emblema.
Para el 11 de abril, la edición de El Diario volvió a comentar el aniversario aurinegro, dando a entender que era el ingreso en nueva etapa que caracterizarían las expectativas de los/as asociados/as y las posibilidades. Ponderó la promoción y práctica de diversas disciplinas deportivas,en todas las divisiones con admirable dedicación, partiendo de institucionalidad “modelo”. Asimismo, otro aspecto distintivo de la entidad, el nunca darse por vencidos/as. El lenguaje empleado es sugerente. El diario matutino señala que signo de la historia del aurinegro ha sido que: “/…/ cuando parecía claudicante, presentábase siempre vigoroso /…/”. Ya considerándolo un veterano, pondera que siendo, “Campeón de muchos años, conserva sus alientos para seguir luchando en los fields /campos/ con ventaja y tenacidad, penetrado de un amplio espíritu deportivo, q’ /que/ no interpreta la derrota sino como un mero accidente del juego noble”. Culmina el comentario, haciendo conexión del espíritu batallador con la constancia, explicando: “Y por eso no ha perdido nunca sus bríos”.
Los días próximos serían ratificación de las frases vertidas. Por ejemplo, la cuarta de “The Strongest” jugó ante la “Escuela de Aviación” en la base de El Alto, el sábado 12 de abril. El resultado fue 4-3 a favor de la entidad que estaba de aniversario, sobre contrincante difícil.
Para el siguiente sábado, 19 de abril, las cosas no resultarían tan halagüeñas al gualdinegro, pues en lance parte de un torneo de varias disciplinas entre Oruro y La Paz, cayó por un gol. Enfrentó al “Bolívar Nimbles” orureño, que presentó arquero y defensas invulnerables. Sin embargo, el domingo 4 de mayo, habría oportunidad de recuperación. Fue ante “Universitario”. En dicha oportunidad, categóricamente la escuadra aurinegra derrotó a la estudiantil por 7 a 0. Los goles fueron anotados Por Pinilla (tres); Bullaín; Toro (dos); y Chávez. Hay que agregar, que fue motivo de alegría institucional el triunfo de la categoría intermedia por la mínima diferencia y de la infantil por 5-2, frente a las homólogas del mismo adversario. Por ahí, habría un traspié más, en visita a Llallawa.
Pero el contraste no debilitaría el temple stronguista. Cual ha destacado Felipe Murguía, que ejerció la presidencia interina, en el torneo “oficial” de L.P.F.A. efectuado del 11 de mayo al 30 de julio, con breve paréntesis éste último mes por participación boliviana en el Mundial efectuado en Uruguay, el Campeonato fue para los colores oro y negro. La culminación, por demás significativa, pues se jugó victoriosamente con el que será “clásico” oponente. Es pertinente añadir una particularidad señalada porMurguía y Marco Antonio Peñaloza. Que el Título fue obtenido de manera invicta, por el elenco que recordaba su vigésimo segundo año. Meritoria hazaña, por donde se la vea, que dejó gran legado. Espíritu que prima y guía.
CAMPEÓN INVICTO EN EL TORNEO DE 1930
Hace casi ocho décadas y media, los atigrados tenían en Universitario a su clásico adversario futbolístico.
Entre los recuerdos más gratos que tiene The Strongest en su historia, está aquel torneo de 1930 el que lo ganó de manera invicta cuando cumplió los 22 años de vida institucional.
El año precedente, The Strongest -que ya había ingresado a la historia con creces- quedó subcampeón ante su tradicional rival de entonces Universitario que consiguió el título del torneo de 1929.
Empezó con ímpetu la gestión en la que cumplía 22 años, a contracorriente de la crisis económica mundial cuyo impacto se hacía notorio en Bolivia. Al promediar enero, cuando fue estrenado el estadio “Presidente Hernando Siles”, tuvo resarcimiento miraflorino venciendo a su adversario en el memorable encuentro inaugural.
El emblemático Eduardo Reyes Ortiz inauguró el marcador, a través de tiro libre.
La gestión no fue sencilla. Hubo altas y bajas. La enfermedad del presidente del club, Héctor Maldonado, llevó a modificación de planes en cuanto a compromisos y programación conmemorativa institucional de abril, sin embargo, ese XXII aniversario de fundación es también de los más recordados y tiempo de logros sobresalientes del club gualdinegro, que vaya los ha tenido.
A dos días de su aniversario, en su edición de domingo El Diario anunció que la entidad aurinegra posponía un par de semanas su celebración anual, que ya se caracterizaba por el “alborozo”. Destacó que en algo más de veinte años era gran “familia”, numerosa y a la vez unida fraternalmente. Entrando en lo que ya constituía identidad definida, añadió acertadamente que el nexo aglutinante de los/as socios/as eran, “/…/ camaradería y afectos ejemplares /…/”. Así además, remarcó el matutino, es que se había logrado imagen prístina y profundo arraigo popular.
También resaltando los valores que dinámicamente identificaban a la comunidad stronguista, el mismo martes 8 de abril, La Razón, dirigida por Gustavo Carlos Otero, presidente atigrado la siguiente década, puso énfasis no sólo en los lauros deportivos, y superación de adversidades respectivas, sino en lo que constituye genuino “/…/ triunfo de los ideales /…/” de los jóvenes fundadores de 1908. Estos se sintetizan como el persistente compromiso ante todo, despliegue de fuerzas sin mezquindad y valiente carácter batallador. A los cuales se agregaron la solidaridad y empeño formativo en calidad decomplementos del deporte.
De esa manera es que fueron superados prejuicios respecto al fútbol de inicios del siglo XX, que ciertos sectores conservadores calificaron de carente de sentido y hasta nocivo para la sociedad. Además, contrarrestando actitudes señoriales o reacias al esfuerzo, los iniciadores encabezados por José López Villamil habían demostrado que una institución podía adquirir estabilidad y larga vida, sin caer en la rutina o el desgaste. Así el gualdinegro consiguió ser “/…/ símbolo del fútbol paceño /…/” y boliviano. Y asimismo, referente de vida asociado con su emblema.
Para el 11 de abril, la edición de El Diario volvió a comentar el aniversario aurinegro, dando a entender que era el ingreso en nueva etapa que caracterizarían las expectativas de los/as asociados/as y las posibilidades. Ponderó la promoción y práctica de diversas disciplinas deportivas,en todas las divisiones con admirable dedicación, partiendo de institucionalidad “modelo”. Asimismo, otro aspecto distintivo de la entidad, el nunca darse por vencidos/as. El lenguaje empleado es sugerente. El diario matutino señala que signo de la historia del aurinegro ha sido que: “/…/ cuando parecía claudicante, presentábase siempre vigoroso /…/”. Ya considerándolo un veterano, pondera que siendo, “Campeón de muchos años, conserva sus alientos para seguir luchando en los fields /campos/ con ventaja y tenacidad, penetrado de un amplio espíritu deportivo, q’ /que/ no interpreta la derrota sino como un mero accidente del juego noble”. Culmina el comentario, haciendo conexión del espíritu batallador con la constancia, explicando: “Y por eso no ha perdido nunca sus bríos”.
Los días próximos serían ratificación de las frases vertidas. Por ejemplo, la cuarta de “The Strongest” jugó ante la “Escuela de Aviación” en la base de El Alto, el sábado 12 de abril. El resultado fue 4-3 a favor de la entidad que estaba de aniversario, sobre contrincante difícil.
Para el siguiente sábado, 19 de abril, las cosas no resultarían tan halagüeñas al gualdinegro, pues en lance parte de un torneo de varias disciplinas entre Oruro y La Paz, cayó por un gol. Enfrentó al “Bolívar Nimbles” orureño, que presentó arquero y defensas invulnerables. Sin embargo, el domingo 4 de mayo, habría oportunidad de recuperación. Fue ante “Universitario”. En dicha oportunidad, categóricamente la escuadra aurinegra derrotó a la estudiantil por 7 a 0. Los goles fueron anotados Por Pinilla (tres); Bullaín; Toro (dos); y Chávez. Hay que agregar, que fue motivo de alegría institucional el triunfo de la categoría intermedia por la mínima diferencia y de la infantil por 5-2, frente a las homólogas del mismo adversario. Por ahí, habría un traspié más, en visita a Llallawa.
Pero el contraste no debilitaría el temple stronguista. Cual ha destacado Felipe Murguía, que ejerció la presidencia interina, en el torneo “oficial” de L.P.F.A. efectuado del 11 de mayo al 30 de julio, con breve paréntesis éste último mes por participación boliviana en el Mundial efectuado en Uruguay, el Campeonato fue para los colores oro y negro. La culminación, por demás significativa, pues se jugó victoriosamente con el que será “clásico” oponente. Es pertinente añadir una particularidad señalada porMurguía y Marco Antonio Peñaloza. Que el Título fue obtenido de manera invicta, por el elenco que recordaba su vigésimo segundo año. Meritoria hazaña, por donde se la vea, que dejó gran legado. Espíritu que prima y guía.
FUENTES Y APUNTES
El Diario, abril-mayo de 1930.
La Razón, abril de 1930.
La Razón, TheStrongest: 100 años de garra, 1908-2008, segunda edición, La Paz, 2008.
Murguía
V., Felipe, Historia del fútbol en La Paz (cronología). Homenaje al
Cincuentenario de Fundación de la Asociación de Fútbol, 1914-1964, La
Paz, Empresa Editora “Universo”, 1964.
Peñaloza,
Marco Antonio, “Centenario del Club TheStrongest (1908-2008): Contexto
fundacional”, en Rosario Aguilar Medina y otros/as, Memorias, fútbol,
gloria y bolivianidad: TheStrongest, 100 años, 1908-2008, La Paz,
Carrera de Historia, UMSA, 2008, pp. 4-7.
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