The
Strongest fue presa de sus propios errores y sólo pudo sacar un empate
frente a San José (1-1) en un partido que pudo ganarlo, pero no lo hizo
debido a su ineficacia en los dos penales que el guardameta Juan Carlos
Robles contuvo.
En
un cotejo de un primer tiempo aburrido y un segundo tiempo de mayor
entrega, el Tigre desperdició la oportunidad de acortar la distancia con
el puntero del torneo, Sport Boys, sacó un punto, pudieron ser tres,
pero nuevamente la maldición de los tiros penales le negaron la opción a
aspirar a más.
San
José no fue el temible rival que esperaban los atigrados, su juego
impreciso hizo aburrida la primera parte y sólo las llegadas de Méndez y
Andaveris dieron emoción a un segundo tiempo donde no pudo derrotar al
debutante José Peñarrieta.
El
Tigre tuvo la primera ocasión de gol en los primeros 45 minutos,
Ramallo ingresó al área chica, buscó acomodar el balón a un costado del
arco, pero Robles estuvo atento y atajó en dos ocasiones.
El
Santo reaccionó con dos tiros de larga distancia de Edwin Rivera, el
primero pegó en el travesaño y el segundo fue tapado por Peñarrieta
quien cumplió una buena labor.
Escobar
sólo apareció en los tiros libres, la mayoría no tuvo la potencia
necesaria para sorprender a Robles quien sólo tuvo que saltar para
agarrar los remates del capitán gualdinegro.
En
el segundo tiempo Escobar se inventó un penal en el área de San José,
en la jugada el defensor del equipo orureño controló la pelota, Escobar
se dejó caer ante el forcejeo, el árbitro pensó que hubo contacto y
marcó penal.
Ante
el penal fallado de Ramallo en el Clásico del domingo, Marteli tomó la
responsabilidad de ejecutar la falta; el brasileño-boliviano tiró a la
derecha y Robles estiró la mano para tapar el remate (62’).
Minutos
después llegó el balde de agua fría para el Tigre que en un descuido
dejó solo a Abel Méndez quien, con un “sombrerito”, marcó el 1-0 (70’).
Pero
el Tigre no se quedó atrás, buscó el tanto de la igualdad, necesitó de
Jair Torrico quien, en una especie de quite de balón a Ramallo, colocó
el balón por debajo de las piernas de Robles para el 1-1 (78’).
El
juego se inclinó a favor de los atigrados, tarde se dieron cuenta que
podían ganar a San José y en una falta de Robles a Ramallo tuvieron la
oportunidad de ganar el partido. Escobar tomó esta vez el balón, remató
al centro, Robles estuvo atento y por segunda vez negó el grito de gol
al Tigre.
El
1-1 castigo a los atigrados que ahora deberán ganar sus próximos
partidos y esperar tropiezos de otros equipos para pensar en un título.
FICHA TÉCNICA
DDFD
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